La Antigua República Yugoslava de Macedonia fue la gran sorpresa del último Eurobasket al terminar en cuarto lugar cayendo en semifinales ante la selección que acabaría ganando el torneo: España y más tarde perder en un dramático partido el bronce contra Rusia. Tras el campeonato los aficionados recibieron a su selección como lo que demostraron ser durante el torneo: unos héroes capaces de dejar atrás el papel de cenicienta y ganar a selecciones de la talla de Croacia, Eslovenia, Grecia o Lituania.
Dos años más tarde, liderados de nuevo por el base Bo McCalebb y Pero Antic en el juego interior, se le presenta la oportunidad de reafirmarse, aunque el camino será muy complicado. En uno de los grupos más duros de la primera fase el equipo que dirige Ales Pipan deberá enfrentarse a Bosnia, Lituania, Montenegro, Serbia y Letonia.
Además de los mencionados McCalebb y Antic de nuevo está en la plantilla el alma del equipo, el mítico Vlado Ilievski que jugará su último torneo con la selección. Para el ex jugador de Barça y Baskonia supone un gran orgullo tener una nueva oportunidad de representar a su país y espera realizar un buen campeonato. El equipo macedonio tiene la suerte de ser uno de los pocos que cuenta para la ocasión con todas sus figuras y pesar de no estar entre los favoritos en este Eurobasket estamos ante un equipo duro, capaz de complicarle la vida a cualquiera tal y como se ha visto en los recientes amistosos que han jugado frente a la selección española en los que a pesar de terminar ganando España de forma clara, ha visto como su rival le ha complicado la existencia en ambos partidos. Quizás no consigan ganar una medalla pero sin duda, igual que ocurriera en 2011, darán que hablar.
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